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    Vestido Saphira

    Saphira

    • Encajes 80 años de Antigüedad
    • Pieza esculpida sobre maniquí
    • Creación Irrepetible
    • Color blanco roto
    • Talla S
    Categoría:

    Descripción

    Una obra única, tejida con historia y paciencia: así comienza la historia de un encaje antiguo, elaborado con manos expertas y un alma llena de respeto por el pasado. Proveniente de 100 metros de un espectacular y antiguo encaje, cuidadosamente tableado a mano, material proveniente de cierre de una antiquísima mercería, un tesoro que ha resistido el paso del tiempo y conserva en cada hilo la esencia de generaciones pasadas.

    Este encaje, con más de medio siglo de antigüedad, lleva en su fibra la memoria de épocas remotas, susurros de tiempo, expresión de arte y dedicación. Cada metro, cada detalle, narra historias de épocas lejanas y momentos especiales que ahora resucitan en una creación moderna y llena de significado.

    Antiguas piezas de encaje, creadas para lucir en vestidos, cortinas o detalles de un comercio de antaño, se transforman en guardianes de un legado vivo, conectando el pasado con el presente en una simbiosis perfecta. Cada vez que el viento acaricia su superficie, parece susurrar secretos de épocas doradas, invitándonos a recordar y valorar la belleza de lo artesanal y lo atemporal.

    Cada hilo, cada tableado, respira historias de amor, tradición y artesanía, convirtiéndose en un símbolo de continuidad y elegancia. Con respeto y sensibilidad, estas fibras cobran nueva vida, dando lugar a una pieza exclusiva donde la historia y la creatividad se funden en una obra que trasciende el tiempo.

    Este trabajo es un acto de amor por lo antiguo, un homenaje a la belleza que nunca pasa de moda. Les invito a descubrir el poder de lo recuperado, donde cada metro de encaje cuenta una historia y cada creación se convierte en un legado que perdura en el tiempo.



    Crear con las manos, es hablar con el alma. Águeda Valle, no trabaja con materia, trabaja con memoria. Cada forma que modela, cada hilo o textura, lleva impresa la historia de sus raíces.
    Detrás hay una misión silenciosa, dar forma a lo que estaba roto. Un alma que llega con el impulso de reconstruir. Su arte es el eco de historias pasadas que reviven y transcienden lo ordinario, convirtiéndolo en extraordinario.
    Sus manos guardan la memoria del linaje. Son el puente entre el alma y la materia, manos que, al crear, recuerdan.
    “Honro la fuerza que me precede, y mis manos crean desde la calma, el amor y el respeto al ayer”
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